martes, 18 de noviembre de 2014

Las nuevas tecnologías, sobre todos las situadas en la red, constituyen una fuente que permiten variar las formas de hacer las cosas para atender a los resultados deseados.

Las nuevas tecnologías pueden emplearse en el sistema educativo de tres maneras distintas: como objeto de aprendizaje, como medio para aprender y como apoyo al aprendizaje.
En la actualidad es normal considerar las nuevas tecnologías como objeto de aprendizaje en si mismo, ya que permite que los alumnos/as se familiaricen con el ordenador y adquieran las competencias necesarias para hacer del mismo un instrumento útil a lo largo de los estudios, en el trabajo o en la formación continua cuando sean adultos.